La historia del Pie

Los siguientes son algunos datos curiosos en la historia de los pies.

Los pies han existido desde los antiguos egipcios. Los primeros pies fueron hechos también por los primeros romanos que pudieron haber aprendido sobre esto de los griegos. Estos pies a veces se hacían en «juncos» que se usaban con el único propósito de sostener el relleno y no para comérselo.

Los romanos deben haber corrido la voz acerca de los pies en toda Europa, ya que el Oxford English Dictionary señala que la palabra «pie» era una palabra popular en el siglo XIV. La primera receta de esta tarta fue publicada por los romanos y era para un pie de miel y queso de cabra con costra de centeno.

Los primeros pies eran predominantemente pasteles de carne. Pyes (pies) apareció originalmente en Inglaterra ya en el siglo XII. La corteza del pastel se conoce como «coffyn». En realidad, había más corteza que relleno. A menudo, estos pasteles se hicieron usando aves de corral y las patas se dejaron colgando sobre el costado del plato y se usaron como asas. Los pasteles de frutas o las tartas probablemente se hicieron primero en el siglo XVI. La tradición inglesa acredita haber hecho el primer pie de cereza con la reina Isabel I.

El pie llegó a América con los primeros colonos ingleses quienes cocinaban sus pasteles en sartenes largos y estrechos llamándolos «ataúdes» como la corteza en Inglaterra. Al igual que en la época romana, las primeras cortezas de pastel americanas a menudo no se comían, sino que simplemente estaban diseñadas para contener el relleno durante la cocción. Fue durante la Revolución Americana que se usó el término corteza en lugar de ataúd.

Con los años, el pie ha evolucionado para convertirse en lo que es hoy en día.

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